El ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Marco Antonio Raupp, y el embajador de Rusia en Brasil, Sergey Akopov, discutieron este jueves (25), en Brasilia, nuevas posibilidades de cooperación en el área de ciencia y tecnología (C&T).
La reunión precede al viaje de la presidenta Dilma Rousseff a aquel país, previsto para diciembre.
Participaron del encuentro el secretario de Desarrollo Tecnológico e Innovación del MCTI, Alvaro Prata, el presidente del Consejo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico, (CNPq/MCTI), Glaucius Oliva, la jefa de la Asesoría de Asuntos Internacionales del MCTI, embajadora Carmen Ribeiro Moura, y el director del Departamento de Temas Científicos y Tecnológicos del Ministerio de Relaciones Exteriores (MRE), embajador Benedicto Fonseca Filho.
Akopov hizo un relato de los eventos programados para los próximos meses, con la participación de representantes brasileños y rusos, que pueden servir de ambiente para futuras negociaciones.
Destacó el Foro Internacional sobre Desarrollo e Innovación, del 31 de octubre al 2 de noviembre, en Moscú, que tendrá la participación del secretario Prata, y la Reunión de la Comisión de Alto Nivel Brasil-Rusia, a ser realizada en febrero, en Brasilia.
“El área de ciencia y tecnología es prioritaria para nuestro relacionamiento bilateral. Tenemos muchos proyectos y espero que, juntos, podamos colocarlos en práctica”, dijo el embajador, que le presentó al ministro brasileño propuestas de cooperación en las áreas de biotecnología y energía solar. Ya Raupp manifestó el interés de Brasil en desarrollar nuevas actividades de cooperación, en especial, en el ámbito del programa Ciencia sin Fronteras (CsF) y en las áreas de satélites y de radiofármacos.
Las articulaciones en los segmentos citados por el titular del MCTI deben ser hechas en el viaje que él pretende realizar a Rusia, los días 26 y 27 de noviembre, acompañado por representantes de la Agencia Espacial Brasileña (AEB/MCTI) y por la Comisión Nacional de Energía Nuclear (Cnen/MCTI). “A nosotros nos cabe esforzarnos para construir algo concreto en esos eventos”, comentó el ministro.
El presidente del CNPq, Glaucius Oliva, habló sobre la importancia de profundizar el diálogo en torno de la cooperación dentro del CsF. “Aún no tenemos convenios firmados con Rusia y uno de los obstáculos es el idioma. Rusia tiene instituciones de excelencia en muchas áreas”, afirmó. “Es el momento de aprovechar esa movilización y la aproximación entre los dos países para consolidar eso.”
Historial de la cooperación
El hito inicial de las relaciones ruso-brasileñas en el campo científico y tecnológico es el Acuerdo de Establecimiento de la Comisión Intergubernamental Brasileño-Soviética de Cooperación Comercial, Económica, Científica y Tecnológica, firmado el 16 de abril de 1981.
En 2010, representantes de los dos países firmaron el Plan de Acción de Alianza Estratégica, cuyo objetivo fue priorizar áreas de cooperación, entre aquellas seleccionadas en el Programa de Cooperación 2010-2012. El plan determina la intensificación de la cooperación científica y tecnológica.
Además, el programa busca promover la cooperación entre institutos de investigación y científicos de los dos países en las áreas de información científico-tecnológica; metrología; red de cooperación tecnológica HIV/SIDA y física de la materia condensada, nanotecnologías, nuevos materiales, biotecnologías, medicina, tecnologías de la información y comunicaciones, efecto del medio ambiente sobre la salud humana, física y matemática.
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