No todo el mundo está satisfecho en Brasil. En realidad son muchos los que en los últimos días han demostrado su indignación con el gasto que el gobierno está realizando para la Copa del Mundo y los Juegos Olímpicos mientras, en su opinión, servicios básicos como la educación, el transporte y la sanidad han quedado desatendidos.
Además de las manifestaciones, multitudinarias, en las calles, el descontento se muestra también en la red. Un video titulado "
El video, en inglés con subtítulos en portugués, una joven llamada Carla describe con detalle los argumentos que miles de brasileños defienden en las calles de todo el país.
"La copa de Brasil va a costar 30 mil millones de dólares, más que las tres últimas Copas del mundo juntas"
"La mayoría del dinero se irá para FIFA sin que lo veamos y el resto irá a los bolsillos de los que ya tienen dinero"
La crítica continúa. Sobre la labor de la policía que desaloja a las bandas criminales de las favelas, Carla argumenta que la celebración del Mundial va a traer un aumento del consumo de drogas en el país, que son facilitadas por las bandas criminales. Los desalojos son otro de los puntos clave del video. Según Carla, cientos de edificios son demolidos para hacer espacio a las construcciones que albergarán los estadios. A las personas que viven en esos edificios se las desaloja y se las echa de sus hogares sin beneficio ni indeminación de ningún tipo. De estos desalojos no
El video concluye con un discurso de Dilma Rousef en el que alababa las virtudes de Brasil como país avanzado, seguro y respetuoso de las minorías.
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